TERAPIA HORMONAL SUSTITUTIVA PARA LA MENOPAUSIA

Comer para vivir y no vivir para comer. Esta frase puede ser la clave para lograr un peso, una figura y una salud envidiable.
Mantener un estilo de vida saludable puede ser lo más importante para conservar su salud durante y después de la menopausia junto con una terapia hormonal sustitutiva (THS) dirigida y controlada por su médico
Cuándo iniciar y detener la terapia hormonal sustitutiva y cómo hacerlo
Dr M.Piza E.

La menopausia es una etapa normal de la vidaEn la época de las cavernas y aún en los primeros años de la historia y hasta avanzada la edad media, las mujeres y hombres tenían una expectativa de vida muy corta y el promedio moría cerca de los cuarenta años. Además de eso, las mujeres empezaban típicamente a estar embarazadas antes de los quince años y continuaban teniendo una y otra gestación hasta el final de su vida reproductiva. A estas mujeres, la menopausia no les causaba preocupación. En primer lugar era un alivio ya que no tendrían más hijos y, por el otro, no era mucho el tiempo que vivirían después de terminado el último periodo menstrual.

Las cosas han cambiado como es obvio para cualquiera: las mujeres tienen pocos hijos (de dos a tres en promedio en el mundo y menos de dos en los llamados países desarrollados) y los empiezan a tener más tarde (promedio 22 años para las mujeres latinas que viven en Estados Unidos, 25.1 años en Europa y 19 en América Latina)
En promedio la menopausia se presenta entre 50 y 55 años y solamente menos del 6% la tienen después de esa edad y cerca del 10% antes de los cincuenta.

Si consideramos que hoy en día la esperanza promedio de vida de las mujeres, que es mayor que la de los hombres, en los países con buen nivel de salud como el nuestro, y que ronda los ochenta años, tendremos que las mujeres tienen que vivir más de 25 años después de la menopausia o sea con una cantidad de estrógenos en su cuerpo que es insuficiente para mantener sus funciones sexuales y otros aspectos corporales que se relacionan con esas sustancias como la calcificación de los huesos, el estado de ánimo y, en fin, todo aquello que las hace ser mujeres y conservar su feminidad.

Esa es la razón para dar la que llamamos TERAPIA HORMONAL SUSTITUTIVA (THS)al unísono con una dieta adecuada alta en calcio y en vegetales verdes y un plan de ejercicio que mantenga los huesos y músculos, que son los principales tejidos para la conservación del calcio, en buenas condiciones, son elementos fundamentales para una vida post-menopáusica sana y feliz.

La cuestión es ¿cuándo darla y cuándo eliminar la THS y cómo hacerlo?.

Se ha comprobado que ni la edad de la menarquia (la primera menstruación), ni el patrón menstrual o la edad del primer parto influyeron en la edad de la menopausia y se observa una tendencia al aumento de esa edad en mujeres con un mayor número de embarazos y partos, y que es mas tardía en las que dan de mamar a sus hijos y más temprana en las fumadoras.

La menopausia indica el final de la capacidad reproductiva de la mujer, significa cese permanente de las menstruación, lo cual quiere decir que es la desaparición de una de las manifestaciones externas de la vida reproductiva femenina; por tanto, constituye uno de los momentos más llamativos de la vida de la mujer con una serie de implicaciones físicas y emocionales. Aunque la menopausia se considera un acontecimiento fisiológico o normal, en realidad es un proceso con muchas implicaciones y en el que pueden aparecer una serie de síntomas y complicaciones relacionados con los cambios hormonales que caracterizan esta época de la vida. Entre ellos destacan los cambios en el humor, tendencia a la depresión, dolores óseos y musculares, resequedad vaginal, inapetencia sexual, bochornos o calores inexplicables, caída del pelo en la cabeza y crecimiento de vello anormal en la cara y otras partes del cuerpo (cambios de masculinización), alteraciones del sueño y cambios en los patrones de enfermedad como aumento de ciertos cánceres y enfermedades del corazón y los vasos cerebrales, hipertensión arterial y otro sinnúmero de problemas.

No hay duda de que la menopausia temprana o la quirúrgicas (que es la que se produce por eliminación del útero o los ovarios a edades tempranas) se asocia a un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular y osteoporosis; mientras que cuando ésta es más tardía hay un mayor riesgo de cáncer de mama y de endometrio. Sin embargo los daños posibles derivados de la menopausia, sobrepasan con mucho los riesgos relacionados con continuar menstruando y, sobre todo, con el uso de THS en dosis controladas y con seguimiento profesional. En realidad se ha visto que el aumento de la posibilidad de cáncer en las mujeres que la toman, es compensado con creces por los beneficios de la THS y el hecho de que las mujeres que la reciben mantienen un contacto más cercano con su médico y se efectúan chequeos más frecuentes hace que cualquier problema se detecte y se trate más a tiempo.

El estudio del “Women's Health Initiative (WHI)” de los Estados Unidos que abarcó a 161,000 mujeres de edades entre 50 y 79 años se enfocó en las estrategias para prevenir la osteoporosis, el cáncer de mama y las fracturas en la etapa posmenopáusica. El estudio duró en total 15 años y mostró algunos hallazgos muy interesantes como el hecho que el consumo de multivitaminas no tiene ningún efecto en la prevención del cáncer, como sí lo tienen las siguientes medidas que SI disminuyen la frecuencia de muchos cánceres:

•    consumir una dieta variada,

•    mantener un peso dentro del rango normal con un índice de masa corporal menor de 27,

•    consumir al menos cinco porciones de frutas y vegetales frescos al día (5 al día)

•    limitar el consumo de grasa sobre todo la saturada de origen animal (que se encuentra en forma imperceptible dentro de muchas carnes)

•    no consumir grasas trans

•    incluir en la dieta grasas del tipo omega tres (derivadas del aguacate, el aceite de pescado y otras fuentes)

•    no comer más de 150 gramos de carne por día

•    hacer ejercicio moderado pero constante (todos los días)

•    practicar la vida al aire libre y evitar el estrés

•    evitar el consumo de alimentos conservados artificialmente

•    hacerse un chequeo médico completo al menos una vez al año

En el estudio la THS se recomienda solamente para tratar los síntomas severos de menopausia y no en forma rutinaria, pero se reconoce que la calidad de vida de las mujeres que la consumen es mucho mejor que la de aquellas que no la toman. Por otra parte estudios muy serios han demostrado que el incremento del riesgo de cáncer de mama es mucho menos importante que la disminución del chance de padecer enfermedades cardiovasculares y cerebro vasculares que son la principal causa de muerte en las mujeres occidentales ya que mientras en una población de 5 millones de habitantes mueren anualmente menos de 300 mujeres por cáncer de mama mientras que mueren miles por infartos o enfermedades cerebro-vasculares.

No queremos decir que con la THS vamos a eliminar totalmente los riesgos de enfermedad cardio o cerebro vascular, pero sí vamos a disminuirla importantemente lo mismo que la osteoporosis que es la causa de las fracturas de cadera que ocupan una de las principales causas de muerte y sobre todo de incapacidad en mujeres mayores.

La terapia hormonal persigue los siguientes objetivos:

1- Tratar los síntomas vasomotores o sea los calores y bochornos.

2- Evitar o revertir la atrofia de piel vaginal y de la mucosa que recubre la uretra y la vejiga y de esa manera evitar la resequedad e infecciones vaginales.

3- Tratar y prevenir los síntomas psíquicos atribuibles al hipoestrogenismo como la falta de apetito sexual, crecimiento anormal del vello, atrofia mamaria e irritabilidad.

4- Mejorar la disfunción sexual .

5- Prevenir la pérdida acelerada de masa ósea, reducir el riesgo de fracturas y osteoporosis.

6- Disminuir la mortalidad cardiovascular (prevención primaria y secundaria).

Según el consenso de muchos especialistas, la THS se debe continuar hasta los 65 a 70 años y después de eso disminuirla progresivamente o de súbito porque no hay diferencias entre ambos métodos. También se recomienda preferir los estrógenos de mejor calidad y los naturales, aunque es necesario, al menos en los primeros años, usar también progestágenos para prevenir el cáncer de endometrio y algunas veces se usan pequeñas dosis de andrógenos o sea hormonas sexuales masculinas.

Los estrógenos vienen en las siguientes formas:

Aerosol nasal

Píldoras o tabletas, tomadas por vía oral

Gel para la piel

Parches cutáneos que se aplican al muslo o al área abdominal

Cremas o tabletas vaginales para ayudar con la resequedad y el dolor durante las relaciones sexuales

Anillo vaginal

Todos métodos son adecuados, pero lo principal es que no se automediquen y consulten con su médico para tomar la decisión más acorde a su caso. Recuerde que de poco sirven los medicamentos si no mantenemos y conservamos un ESTILO DE VIDA SALUDABLE con las medidas dietéticas y de comportamiento que incluimos más arriba.